Prensa europea: El general ya tiene quien le escriba

(A Arcadi Espada, por las fuentes y por saber mirar a los lados antes de adelantar)

Las declaraciones del general Mena. Así interpretadas por la prensa extranjera, con olfato de naftalina:

• Le Monde: “Un general español se levanta contra la autonomía de Cataluña”
• The Guardian: “Cuando un general se subleva”
• Financial Times: “Asedio a Cataluña”

Sin matices. Sin análisis. Sin trastienda. Para ellos, España tiene que ser así, para cobijar su imagen vieja, contada con aire preocupado que musita “¿otra vez la dictadura?” Añoranza de la clandestinidad ajena para conservar entre polillas sus mitologías propias.

Rotundos titulares que nos evocan como el refugio políticamente exótico de Europa. Una pequeña brigadilla de hispanistas de ocasión monta guardia permanente al acecho de la España negra, eterna en su imaginación congelada.

La prensa extranjera, mohína por la homologación de España con los países europeos, nos añora con su continua mirada sepia. Nos recupera rápidamente como mito que acomoda sus análisis a la pereza y celebra este lugar típico de vacaciones.

En sus reseñas de las declaraciones de un general español vuelve con furor la imagen (republicana) de la guerra civil, el guerrillero idealizado, el santoral Lorca-Buñuel-Alberti, el ejército feroz y siempre acechante. El calendario zaragozano en versión europea. Las brigadas internacionales como operador turístico.

Por la noche, tras las tuertas tertulias político-literarias, se van a un tablao flamenco. A confirmar su necesidad de paraísos exóticos donde recrear su épica dormida.

España como oropel de su vacío, de su pasmo.

Sin novedad en el alcázar de la tribuna europea.