10 de abril de 2006

Procesión internacional de la paz

Abres El País y se te caen las letras encima, ensuciando como goterones negros de renuncia:

Titular: “Annan pide a Zapatero que ‘aproveche’ el alto el fuego de ETA para lograr ‘la paz permanente’ “
Subtítulo con respuesta de estadista: “Zapatero reclama ‘cautela y prudencia’ y descarta por el momento una mediación de la ONU en el proceso de paz” [Para, Kofi, el ritmo, es el ritmo]
¿Qué paz si no ha habido guerra?

Mediación de la ONU: ya anunciaba el comunicado de ETA, al referirse a Francia, su deseo de implicar al extranjero en el ‘proceso de paz’. El consejero vasco de Interior, al hablar de su país emparedado entre dos Estados, coincide con esa visión globalizada, irreversiblemente moderna. El presidente del gobierno español remata el propósito fijando los plazos. No es el ‘momento de que intervenga la ONU’, pero puede ser necesario el recurso si la conclusión del proceso le tocará a un gobierno del partido rival.

Resurge la descolonización, la vieja querida de la izquierda, lucha de mitos guerrilleros contra salacofs opresores, con ruido de manifestaciones europeas en el telediario y resoluciones radiadas de organismos internacionales. El onanista agarrado a su muñeco, con el libro de Lorca en la mesilla, no quiere que le desvele el sueño este develador de visita.